Introducción
Toda empresa que procure crecer y funcionar de la mejor manera, debe estar en conocimiento de sus resultados del ejercicio, o también llamado estado de resultados.
Con éste se logra determinar si las estrategias que se aplican están dando resultados positivos o si, por el contrario, deben modificarse. ¡Conoce más a continuación!
¿Qué es el estado de resultados?
Tal vez el concepto sea nuevo para ti y quizá no lo relaciones con el manejo de la rentabilidad… ¡Pero no es así!
El estado de resultados es un reporte financiero que muestra el estado de ganancias y pérdidas de la empresa. En él se describen de manera minuciosa las operaciones de la entidad durante un periodo de tiempo determinado, para luego analizar cuál fue la utilidad o pérdida neta, así como el resultado integral.
Como verás, el estado de resultados evalúa la rentabilidad de la empresa, además de evaluar el desempeño, estimar el potencial de crédito, los flujos de efectivo y tener una base para determinar los dividendos.
Esto es útil para la toma de decisiones, pues muestra el estado de pérdidas, gastos operativos, los costos de producción, entre otros indicativos que nos ayudarán a evaluar las decisiones correctas para una determinada situación financiera de la empresa.
Este indicador financiero se estructura según los ingresos financieros, los costos y los gastos financieros, aunque sobre esto te hablaremos a detalle más adelante.
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Información requerida para elaborar un estado de resultados
Para elaborar un estado de resultados, necesitarás el balance general de la empresa. Allí encuentras toda la información financiera de un periodo determinado más el capital contable o patrimonio.
Volvamos un poco al punto de la estructura que te mencionamos hace poco. Los ingresos, costos y gastos, están compuestos por ciertos puntos que te dejamos a continuación:
- Ventas: aquí se representa la ganancia obtenida de los artículos que se vendieron.
- Costo de ventas: es el costo de los bienes vendidos, cuánto le costó a la empresa el artículo que vende.
- Gastos de ventas: son los gastos relacionados con la comercialización de productos o servicios. Aquí entra la publicidad, pagos de los vendedores, pagos de transporte, entre otros.
- Gastos de administración: son los pagos de secretarias, administradores y todas las salidas de dinero de operaciones administrativas.
- Gastos y productos financieros: por lo general se refiere a los gastos e ingresos relacionados con el banco. Por ejemplo: intereses por demora de pago, descuentos por pagos anticipados, intereses por préstamos bancarios.
- Utilidad antes de impuestos: es el monto sobre el cual se calculan los impuestos. Se calcula después de cumplir con los gastos operacionales y financieros.
- Impuestos: son los tributos que se pagan al Estado.
- Utilidad neta: son las ganancias o pérdidas de la empresa luego de los gastos de operación, gastos financieros e impuestos de un periodo contable.
- Utilidad bruta o margen bruto de ganancia: es un indicador que nos ayuda a determinar el margen bruto de ganancia, es decir, la diferencia entre las ventas y costo de ventas. Esto indica el dinero que gana la empresa por la venta sin ningún gasto adicional.
- Depreciaciones y amortizaciones: son los pagos que hace la empresa de forma anual. Representan la disminución del valor de activos o bienes tangibles que posee.
- Utilidad de operación: es la ganancia o pérdida que se obtiene en relación a las actividades que tienen relación directa con el objeto social de la empresa. Se determina por la diferencia entre la utilidad sobre flujo (EBTIDA) y las depreciaciones y amortizaciones.
- Utilidad sobre flujo (EBITDA): con este indicador se miden las ganancias o utilidad que obtiene la empresa de los ingresos menos los gastos, sin incluir gastos financieros como impuestos, amortizaciones, depreciaciones e intereses de la empresa. De allí sus siglas, en inglés (Earnings before interest, taxes, depreciation and amortization).
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Objetivos del estado de resultados
Como ya sabemos, el estado de resultados sirve para medir el desempeño financiero de una empresa. Pero, en realidad, existen más objetivos que pueden alcanzarse al realizarlo:
Tener una evaluación exacta de la rentabilidad de la empresa
Da una visión clara de estado de cambio del patrimonio neto, estado de flujos de efectivo, entre otros estados financieros básicos.
Identificar maneras de optimizar recursos
Mediante el análisis de resultados positivos y negativos, permite evaluar el porcentaje de ventas netas y las ganancias, así como también los recursos económicos que podrían ser optimizados.
Evaluar la eficiencia operativa
Analiza los gastos de administración, gastos financieros y, en sí, todas las acciones operacionales dentro de la empresa. De esta manera, se entiende qué va bien y qué puede ser mejorado para aumentar no solo las ventas, sino también la eficiencia en la empresa.
Determinar cuánto dinero se pierde por cada cifra ganada
Con esto claro, se mejoran los procesos de producción y ventas a largo plazo, teniendo posibilidades de mejorar los ingresos netos.
Estimar proyecciones de ventas
Es un elemento de apoyo para la estimación de flujos de efectivo, para así poder determinar proyecciones de ventas futuras. Así se facilitan las relaciones y estimaciones de dividendos para los accionistas. Además, es un punto que los inversionistas toman muy en cuenta al momento de evaluar la empresa.
4 datos que debes tener en cuenta sobre los estados de resultados
Para facilitarte la realización de este reporte, te daremos 4 datos que te ayudarán a hacerlo:
1. Tómalo en cuenta al momento de negociar créditos con entidades bancarias e inversores
Un estado de resultados es un respaldo y una especie de resumen de la situación actual y la historia financiera de la empresa. Es una manera genial de crear confianza la hora de conseguir inversionistas, pues en él se encuentra toda la información sobre flujos de efectivo, activos fijos y proyecciones de ventas.
De igual forma, por su efectividad para brindar información sobre el estado financiero de la empresa, te será muy útil para pedir créditos ante el banco.
2. Es un elemento de apoyo en la gestión gerencial
Esto es así gracias a que brinda información útil para el proceso de toma de decisiones y planeación estratégica. Los resultados obtenidos en este reporte financiero serán clave para generar una mejor gestión de los procesos.
3. Es tu soporte a la hora del pago de intereses
Te ayuda a tener solvencia en cuanto a deudas financieras, ya que incluye todo lo que tiene que ver con los pagos al Estado.
4. Si lo automatizas, todo se simplifica
Existen softwares que te ayudarán a hacer todo el trabajo de forma automatizada. Ahorras tiempo y tienes resultados garantizados, por ejemplo: Wave, Alegra o Contasimple. Valdrá la pena esta inversión, aunque también puedes manejarlo a la antigua con Excel.
Ahora que conoces este nuevo concepto, esperamos te sientas motivado a llevar el estado de resultados a cabo para hacer un mejor trabajo con tu empresa. Si eres un inversionista, es buena idea que lo solicites para evaluar los negocios antes de colocar capital en alguno de ellos.
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