El e-learning se afianza en Latinoamérica como solución al rezago educativo

Si añadimos que América Latina es el líder en adopción de tecnologías móviles a nivel mundial con de 415 millones de usuarios conectados a la red móvil y que gran parte de los niños y adolescentes son ya nativos digitales que no necesariamente se adaptan a las metodologías tradicionales de aprendizaje, estamos hablando de que el sector Ed-Tech crecerá aún más en los próximos años.

Esto traerá un sin fin de retos, pero también de oportunidades para el sector en toda la región. Especialmente donde la necesidad de cerrar la brecha digital es fundamental, y el impacto de los esfuerzos educativos puede traducirse en un mayor potencial de innovación y desarrollo, lo que nos deja ante un panorama con grandes posibilidades para impulsar una mejor calidad de vida tanto de las personas como de las comunidades a través de soluciones de aprendizaje mediadas por tecnología.

La transformación digital en prácticamente todas las industrias, que se aceleró debido a la pandemia, junto al alto costo de las escuelas y los rezagos educativos en la región, ha hecho que el sistema tradicional de aprendizaje tenga que replantear sus programas académicos para ofrecer salidas a los padres de familia preocupados por un mercado laboral que cada vez pone más peso en las habilidades o skills por sobre títulos y grados.

Para miles de padres de estudiantes de educación media y superior esto significa pensar en si contar con un título universitario garantiza el éxito profesional o si la prioridad se centra en la necesidad de desarrollar más competencias.  

Y este énfasis en el desarrollo de competencias específicas, sobre todo aquellas con una clara aplicación profesional, surge de algunas de las características sociales, culturales y económicas de la población, impulsan a muchas personas a buscar opciones en línea, accesibles encosto y en tiempo, en la búsqueda de fortalecer y desarrollar su educación y la de sus familias.

Este panorama ha abierto miles de posibilidades para escuelas disruptivas en formato digital, que pueden ofrecer nuevas herramientas a los niños para desarrollar skills desde soft como el pensamiento crítico hasta hard como programación, habilidades altamente valoradas en el mercado laboral.

A pesar de que es difícil predecir el futuro, estamos ante una época de oportunidades para las Ed-Techs, pero también de retos. Hay muchas en el mercado y dependerá de los resultados que se obtengan en esta etapa para que las familias latinoamericanas les den una nota satisfactoria.